sábado, 31 de agosto de 2013

Mary Celeste, el histórico buque fantasma.


 El 4 de diciembre de 1872 el barco Dei Gratia, que navegaba por el océano Atlántico, divisó un bergantín de 31 metros de eslora que se dirigía a todo trapo rumbo al estrecho de Gibraltar. Tras observarlo durante 2 horas, los miembros de la tripulación concluyeron que singlaba a la deriva. Al acercarse pudieron leer en el costado: Mary Celeste.

El capitán del Dei Gratia, David Reed Morehouse, se quedó sumamente sorprendido. Hacía justo un mes que él y su mujer habían estado cennado con su homólogo de la errática embarcación, Benjamin Briggs y su esposa. De hecho, el 5 de noviembre, el Mary Celeste había salido del puerto de Nueva York hacia Génova.

El navío Mary Celeste.

Cuando lo abordaron, los marineros descubrieron que se hallaba en buenas condiciones, a pesar de que solo funcionaba una bomba de achique, había mucha agua en la cubierta y algo más de un 1 metro en las bodegas. Las escotillas estaban abiertas, el reloj no funcionaba, el compás se hallaba destruido y habían desaparecido el sextante y el cronómetro marino. Por otro lado, el único bote salvavidas parecía haber sido lanzado. Todo indicaba que el buque fue abandonado por alguna razón. La carga, compuesta por 1701 barriles de alcohol estaba intacta, al igual que la comida y las reservas de agua potable, para seis meses. Solo 9 de los barriles que componían el cargamento se habían vaciado.

El registro de puente de mando y la cabina del capitán revelaron que se habían esfumado todos los papeles relativos al barco excepto el diario de a bordo. La última entrada databa del 24 de noviembre, cuando el Mary Celeste se encontraba a 160 Km al oeste de las Azores. Desde entonces ninguno de sus 10 ocupantes -7 marineros, el capitán Briggs, su mujer y su hija de 2 años- ha aparecido. 

la etapa final de la travesía del Mary Celeste. Pica para ampliar.

Curiosamente, al año siguiente unos pescadores españoles recuperaron dos balsas; una con 4 cuerpos y la otra, con uno y la bandera americana. ¿Procedían del barco fantasma? Nunca se sabrá. Fueron enterrados en una fosa común sin ser identificados.